La música,
alternativa contra la agresión de los jóvenes escolares
en la erradicación del ‘bullying’ en
los colegios.
A la lista de
beneficios que se le atribuyen a la musicoterapia, se suma uno más: acabar con
el ‘bullying’.
Así lo ha comprobado
el médico mexicano Mario Sánchez, quien a través de terapia musical ha logrado
tratar el manoteo escolar en más de 20 instituciones educativas del Canadá.
Según el experto, que
está de visita en Colombia, las vibraciones musicales resuenan en las ondas
cerebrales, llegando a producir -inlcuso- cambios de conducta.
El Doctor Sánchez,
quien ha sanado también a pacientes con cáncer, depresión y otras dolencias con
la escogencia de la música adecuada, habló con
El País, antes de
dictar su taller el próximo 11 de febrero en Cali.
¿De qué manera
funciona la musicoterapia en el control del ‘matoneo’?
Se utiliza como una
herramienta complementaria. La musicoterapia comienza a ganar terreno en la
educación, específicamente la que se refiere a su utilización al interior del
aula,
es decir, la que
contribuye a mejorar la relación profesor-alumno, profesor-directivos y la
relación entre profesores.
La musicoterapia es
una técnica terapéutica que se basa en las propiedades que tiene la música en
la fisiología/psicología de las personas,
siendo sus
aplicaciones múltiples: desde motivar la creación de nuevas conexiones
neuronales en los niños, hasta generar espacios sonoros
positivos para
desarrollar las actividades diarias en paz y relajar a la persona que esté
viviendo una situación tensional, como generalmente ocurre en los
colegios.
¿Cómo vincular a los
estudiantes en esta terapia cuando muchos de ellos son reacios a reconocer que
agreden o son agredidos?
Lo abordamos de una
manera integral, utilizando como eje el sistema de escucha que se denomina ‘Medical Sound Therapy’,
que es una música que
ha sido arreglada con programas de ingeniería de última generación y que
optimiza el campo sonoro,
empatando con la
actividad que está desarrollando el chico. No es igual la clase de matemáticas
que de español.
Es el mismo cerebro,
pero diferente la zona cerebral encargada del aprendizaje y, por ende,
diferente la frecuencia cerebral.
El objetivo es que el
chico se equilibre con una frecuencia que reduzca su nivel de ansiedad, así
buscará en menor medida liberar tensión.
Otro elemento que
ayuda es la práctica del yoga. Y en
casa, estudiar bajo el estimulo armónico frecuencialmente hablando, en lugar de
tener la Tv.
o el videojuego a
todo volumen mientras los niños estudian.
¿Qué otras
actividades pueden impactar de manera positiva a la comunidad estudiantil?
Los talleres de
manualidades, pues los chicos ahora se ocupan poco de actividades de sincronía
psicomotora e interacción social.
Se están dedicando de
manera adictiva a internet y a los videojuegos, alejándose de sus habilidades
manuales en otros entornos.
La práctica de
deporte permite el reencuentro de los chicos con la naturaleza, y hacen que
liberen de manera consciente su ansiedad y no golpeando o molestando a sus
compañeros en la escuela.
Desde su experiencia,
¿qué actitud se debe tomar frente al matoneo?
De apertura y
reconocimiento. Los chicos son víctimas de un medio social que se pudrió y, al
someterlos a estímulos demasiado violentos, ellos sólo reaccionan a ello.
Los padres deben
poner 100% de atención a lo que hacen sus hijos, sobre todo a sus necesidades
emocionales,
pues los han
abandonado y el precio que estamos pagando ahora como sociedad es muy alto. No
busquemos culpables,
busquemos
soluciones. Un docente es alguien que da
algo más que información científica, es un mentor que forma a los seres que
tiene a su cargo,
aunque sea unas horas
al día, que si las sumamos son muchas en un año escolar.
¿Por qué nos afecta
la música?
Cómo funciona: La
percepción de la música está íntimamente ligada a las emociones. Las áreas
cerebrales que se activan con las emociones y la música son prácticamente las
mismas,
porque existen redes
neuronales que interconectan diferentes áreas responsables de su percepción y
procesamiento.
De alguna manera la
música impacta directamente en el sistema líbico, sede de nuestras emociones,
sin pasar por el filtro de nuestra parte más consciente,
que está relacionada
con el neocórtex. De allí que el musicoterapeuta tiene objetivos terapéuticos
acordes con cada necesidad.
Para el ‘bullying’:
Las melodías tranquilas permiten que el cuerpo libere endorfinas y por ende
genere una sensación de tranquilidad.
El objetivo principal
de este procedimiento en los niños es reducir la agresividad, junto a mejorar
la productividad, facilitar la comunicación y promover la expresión individual.
En tal sentido, la
musicoterapia se ha aplicado como un método efectivo para eliminar los
sentimientos de rabia,
Frustración, angustia
o tristeza de los niños, influyendo positiva mente en la conducta negativa de
éstos, y facilitando la comunicación en un contexto lúdico y entretenido.
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